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Una nueva tormenta tropical denominada Octave se formó en el Pacífico mexicano frente a las costas del estado de Colima, en el oeste del país, informó el domingo el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“La tormenta tropical Octave, que se formó esta madrugada” se localiza en el Océano Pacífico 190 km al sur de Isla Socorro, en Colima, y a 650 km al suroeste del balneario de Cabo San Lucas, en Baja California Sur (noroeste), dijo el SMN en un comunicado.
Octave se desplaza a 20 km/h con vientos sostenidos de 75 km/h y rachas de hasta 95 km/h, con una circulación de vientos que favorece nubosidad y lluvias de fuertes a muy fuertes en los estados de Sinaloa (noroeste), así como de Nayarit, Jalisco, Colima y Michoacán, en el oeste del país, y con menor intensidad en Baja California Sur, añadió la dependencia.
El pronóstico para las siguientes horas prevé que el sistema se acerque a Baja California Sur como tormenta tropical, por lo que continuaran las lluvias en el noroeste del país.
El SMN advirtió que las intensas lluvias pueden producir encharcamientos e inundaciones en áreas urbanas, además de posibles deslaves en zonas montañosas, así como crecidas y desbordamientos en ríos. Sugirió a la población mantenerse alerta a los llamados de protección civil.
Octave se acerca a costas mexicanas a solo tres semanas de que los huracanes Manuel e Ingrid azotaran de manera simultanea al país, dejando graves daños en varios estados, principalmente en Guerrero (sur).
Ingrid y Manuel trajeron una cantidad histórica de lluvias que dejaron un saldo de 157 personas fallecidas, de las cuales 101 murieron en Guerrero, y decenas de desaparecidos en La Pintada, un pueblo de la montaña en el que un alud sepultó una tercera parte de la comunidad.
Las lluvias torrenciales de septiembre dejaron 1,7 millones de damnificados.
En tanto, en el estado de Puebla (centro), el gobernador Rafael Moreno Valle anunció el domingo el inicio de la construcción de 134 casas para reubicar a la población de Huixtla, ubicado a 215 kilómetros de la capital mexicana, que se encuentra en riesgo permanente de deslaves.
El Nuevo Huixtla estará ubicado a unos kilómetros de donde está actualmente el pueblo, pero en una planicie alejada de cerros que puedan desgajarse.
AFP
