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Los nuevos problemas de salud de la presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que la obligarán a permanecer un mes en reposo, sumaron incertidumbre a un escenario político complejo para el oficialismo de cara a las elecciones legislativas del 27 de octubre y sus últimos dos años de gobierno.
Los médicos diagnosticaron un hematoma en el cerebro, producto de un traumatismo de cráneo que sufrió el 12 de agosto, un día después de las primarias legislativas, y un cuadro de arritmia coronaria.
Tampoco se definió aún si Fernández continuará al mando del gobierno durante el mes de reposo o si delegará la primera magistratura en su vicepresidente, Amado Boudou, uno de los políticos cuya imagen ha decrecido más en los últimos tiempos.
En caso de enfermedad presidencial, la Constitución prevé que asuma como interino el vicemandatario, quien fue ministro de Economía entre 2009 y 2011.
El reposo dejará en tanto a Fernández al margen de la campaña electoral.
“Desde Venezuela te acompañamos con una oración amorosa, para una Presidenta del Sur que ama a su pueblo. Pronta recuperación”, expresó Nicolás Maduro, presidente de Venezuela
Agencias
