Fuerte desacuerdo entre ONU y Rusia

El canciller ruso rechazó la responsabilidad del régimen sirio en el ataque químico.

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El régimen sirio y su aliado ruso se movilizaron para impedir cualquier resolución de la Organización de las Naciones Unidas (ONU)que pueda abrir la vía a un recurso a la fuerza contra Siria.

Rusia acusó ayer a los inspectores de la ONU que investigaron el ataque químico del 21 de agosto en Siria de haber ignorado en su informe indicios que les remitió el Gobierno sirio.

Siria confía en que la ONU no adopte una resolución sobre sus armas químicas que contemple el recurso a la fuerza militar y le agradeció ayer a Moscú por su apoyo.

Pese al acuerdo entre Estados Unidos y Rusia para destruir las armas químicas sirias a mediados de 2014, ambas partes siguen teniendo puntos de vista diferentes sobre lo ocurrido el 21 de agosto y sobre la inclusión del recurso a la fuerza.

Para Estados Unidos y Francia, solo el régimen de Bachar al Asad puede haber llevado a cabo el ataque, mientras que Rusia ha reiterado varias veces la sospecha de que fue una “provocación” que organizaron los rebeldes con el objetivo de fomentar una intervención militar internacional en el país.

Al Asad calcula que la posición rusa puede contribuir a crear “un nuevo equilibrio mundial”.

El viceministro de Relaciones Exteriores sirio, Faisal Moqdad, aseguró que los resultados de los ataques “son una gran mentira de las potencias occidentales y creemos que no se utilizará nunca (el capítulo VII) porque nada lo justifica”.

Reacción

“Estamos decepcionados con el enfoque de los inspectores de la ONU que prepararon su informe en forma selectiva e incompleta”. Serguéi Riabkov, viceministro ruso de Relaciones Exteriores.

Agencias

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