Foto. AFP
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Vuelos comerciales y militares empezaron a evacuar ayer a los miles de turistas varados en Acapulco, una zona turística azotada en los últimos días por los ciclones “Íngrid” y “Manuel”, cuyos remanentes continúan afectando a México, donde han causado al menos 50 muertos.
Tres aerolíneas comerciales mexicanas empezaron ofrecer vuelos especiales desde el aeropuerto internacional de Acapulco, que había sido cerrado el fin de semana por las inundaciones en la terminal de pasajeros.
La alcaldía de Acapulco calculó que unos 40 mil turistas mexicanos y extranjeros quedaron atrapados debido al cierre del aeropuerto y de las dos carreteras que lo comunican con la Ciudad de México, a causa de los deslaves en las vías.
Más de la mitad de Acapulco sigue inundado, tras cuatro días consecutivos de tormentas.
Las zonas más castigadas del balneario se encuentran en la empobrecida periferia y en Diamante, un área hotelera donde las inundaciones llegaron a alcanzar cerca de tres metros.
El secretario (ministro) de Gobernación, Miguel Ángel Chong, dio un balance de al menos 47 personas muertas por efectos de las lluvias en el país.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió de que “Manuel” tiene 60% de posibilidades de fortalecerse de nuevo en las próximas 48 horas.
En Veracruz se reportaron 20 mil 188 viviendas dañadas y 129 ciudades incomunicadas.
Agencias