Nina Siakhali Morade se encuentra inmersa en un gran escándalo debido a que ha sido elegida como miembro del concejo de la ciudad de Qazvin, Irán, pero un grupo de iraníes radicales se oponen a que asuma el cargo por ser demasiado bonita y sexy.
El motivo es que dicho sector no quiere una modelo de pasarela en el concejo, según afirmó un alto funcionario iraní, a pesar de que Morade no ha utilizado su belleza durante la carrera electoral.
Otra de las críticas es que la política iraní aparece en sus carteles de campaña electoral con velo, pero dejando ver un pequeño mechón de cabello, lo que es considerado inaceptable para las normas islámicas.
Por ello, sus detractores han solicitado su expulsión, pese a que su victoria ya fue anunciada y altos funcionarios del Gobierno están considerando el pedido, por los enfrentamientos que se han producido en las calles.
Los enemigos de Nina consideran que ella tampoco ha respetado las leyes de Dios.
En el momento en que su elección fue confirmada, los conservadores lanzaron protestas para exigir su destitución escudándose en unos carteles electorales vulgares y en contra de la religión y descalificándola por no haber respetado las normas de su cultura.
Agencias
