Imagen ilustrativa. Foto: Getty images
El policía de la ciudad china de Linzhou, Guo Zengxi, arrojó un bebé al piso fracturándole el cráneo en tres partes. Aunque la niña sobrevivió, se encuentra en estado grave en un hospital de esa localidad.
Zengxi se dirigía a un bar de karaoke después de beber con sus amigos cuando vio a un hombre con un bebé en compañía de su esposa. Según reporta el portal RT, tras apostar con sus amigos que el bebé era un muñeco, el policía le tocó la cara primero y seguidamente se la arrebató de los brazos a su padre para estrellarla contra el suelo, indicó el informe policial.
La niña, llamada Yueyue, fue llevada a un hospital de la localidad para ser enviada posteriormente a Beijing con el objeto de ser sometida a exámenes más exhaustivos, según las autoridades locales.
El policía quien recibió 15 días de reclusión disciplinaria después del incidente, lo que ha provocado indiganción en redes sociales chinas, por lo cual las autoridades han prometido “actuar”.
“Todos los funcionarios tratarán el caso de acuerdo con la ley y las disciplinas, y no mostrarán clemencia”, señalaron funcionarios de la ciudad de Linzhou en un comunicado.
Publinews Chile
