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El subcontralor de calidad del gasto de la Contraloría General de la Nación, César Elías, reveló que “hay resultados muy impactantes” relacionado a la auditoría de las más de 53 mil plazas del ministerio de Salud.
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En entrevista al programa A Primera Hora de Emisoras Unidas, Elías dijo que no podía adelantar detalles del hallazgo pero adelantó que establecieron casos de personas contratadas laboralmente que no se presentan a trabajar.
Asimismo, dijo que han determinado “mucha influencia de organizaciones sindicales” en esos casos.
Subcontralor César Elías Emisoras Unidas Foto:
En cuanto a las investigaciones que han llegado hasta una denuncia ante el Ministerio Público (MP) indicó que se han presentado 650 desde 2015 a la fecha.
Más auditorías con trabajo de CICIG
Elías comentó que se integraron grupos de trabajo para auditar los ministerio de Salud y Comunicaciones como parte de un convenio firmado entre la Contraloría y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) en la que participarán fiscales del MP.
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Explicó que en el caso del ministerio de Salud las auditorías serán de datos desde el 2002, según lo que defina la comisión de auditoría y la CICIG. “Tenemos que ser muy reales con el trabajo de la auditoría”, agregó.
De las auditorías al ministerio de Comunicaciones dijo que será de las obras en sí y de algunos proceso, como el caso donde se estableció que fueron robadas identidades de personas para abrir empresas y luego inscribirlas para precalificados y así poder participar en proceso de licitación.
Fiscalización revela vicios
La diputada de Encuentro por Guatemala, Nineth Montenegro, explicó que en auditorías hechas en un hospital de Quiché determinaron supuestas anomalías como el hecho de que la nómina tiene 400 empleados pero a simple vista ellos pudieron observan aproximadamente 30. Entre las justificaciones que le dieron es que algunos tenía permiso de ausentarse por problemas de salud.
Diputada Nineth Montenegro Emisoras Unidas Foto:
Montenegro también habló de un caso donde descubrieron que hay 48 obras pagadas por el Estado pero que nunca se construyeron o realizaron.
Uno de los casos que más sospecha le ha generado son los dragados de los que considera que es la “forma perfecta de sobornar y estafar al Estado”.
A su criterio, es necesario hacer cambios los sistemas digitales donde se hacen constar los avances de las obras, pero también en aspectos como la ley de servicio civil del Ejecutivo, por las plazas laborales.
