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El vicepresidente de la Cámara Guatemalteca de Periodismo, Rolando Archila Dehesa, habló sobre los retos de la prensa guatemalteca.
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Por medio de un comunicado de prensa, la Cámara Guatemalteca de Periodismo lamentó que el juicio penal que se sigue por los delitos de genocidio y contra los deberes de la humanidad en contra de Efraín Ríos Montt y Mauricio Rodríguez Sánchez “no sea documentado por la prensa, aunque sí se permita la presencia de observadores internacionales”.
“Lo anterior supone una restricción a los derechos de informar y ser informado, derecho inalienable de la sociedad guatemalteca. Esta restricción evidencia una prohibición únicamente a medios de comunicación, periodistas y comunicadores, y no a otras personas”, se detalla.
Ante esto, se le insta al Organismo Judicial a revisar tal decisión. Y se les exhorta a las entidades de prensa, organismos de defensa de la libertad de expresión, comunicadores, periodistas, medios de comunicación y ciudadanos en general que reivindiquen los derechos de informar y ser informado”, se consigna.
“En todo caso, dada la gravedad de la sindicación relacionada, el asunto amerita no solo la máxima publicidad, sino también de una absoluta transparencia, que solamente la puede garantizar la prensa independiente”, se lee en el documento.
“La libertad de expresión no se termina de luchar por ella, es una causa que siempre tiene amenazas y siempre debemos tratar de defenderla desde nuestro punto de vista. El logo de la Cámara Guatemalteca de Periodismo es ‘Sin libertad de expresión, sencillamente no hay libertad’”.
“Los grande influenciadores hoy en día, no solo en Guatemala, sino en el mundo, siguen siendo los medios de comunicación”.
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“Ahora el poder se ha repartido un poco en el tema de la inmediatez y de influir, ahora cualquiera puede informar sobre cualquier tema, pero en esencia la credibilidad y el profesionalismo alrededor en la transmisión de la información sigue estando en los medios de comunicación”.
“Lo que no estamos de acuerdo es que hayan políticos involucrados dentro de la llamada radio comunitaria o que tengan negocios en las radio comunitaria, ya que según nuestro punto de vista el proyecto presentado en el Congreso tiene serios defectos de índoles jurídicos y técnicos”.
