La niña Belén Hernández Domínguez, de tres años, padece microtia/atresia bilateral, eso significa que nació sin orejas y con los canales auditivos cerrados.
La esperanza de Belén de escuchar se hizo realidad. A principios de agosto, en Los Ángeles, fue sometida a una de las primeras cirugías, la cual consistía en restaurarle la audición.
Para eso le extrajeron piel de su pierna y así poder reconstruirle la oreja derecha. En marzo 2015 le operarán su orejita izquierda y le colocarán los implantes de sus aparatos auditivos.
Entérate de más: https://www.facebook.com/#!/orejitasdeamor
Publinews