Foto: PNC
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Las fiscalías contra la trata de personas, de delitos contra la vida y el narcotráfico, en conjunto con la Policía Nacional Civil y la Drug Enforcement Administration aprehendieron ayer a tres personas que sindican de integrar una estructura criminal que lucra con personas y estupefacientes.
El informe oficial detalla que las capturas son el resultado de una denuncia que presentó en 2013 Estados Unidos y México.
Las víctimas procedían de Albania, Macedonia y Ecuador, además de Centroamérica. Desde hace un año le seguían la huella al supuesto líder, Julio César Serrano Samayoa, que cobraba entre Q40 mil y Q75 mil trasladarlos a esas naciones.
En su residencia en Huehuetenango hallaron carros de lujo, armas y un pequeño zoológico.
El Ministerio Público cree que Francisco Carrillo, oficial de la PNC, trabajaba para Serrano Samayoa y facilitaba el tránsito de ilegales al alertar sobre puestos de control.
El tercer capturado es Edin Hernán Villatoro Calderón.
Los tres fueron trasladados vía aérea a la capital.
La Organización de los Estados Americanos calcula que este delito genera en América Latina US$16 mil millones. En Guatemala, el 80% de los casos queda en la impunidad. De acuerdo con el fiscal contra la trata de personas, Alex Colop, el MP recibe 200 denuncias, de las cuales solo 40 inician proceso.
Christian Skoog, representante de Unicef en Guatemala, resaltó que el problema es mayor porque hay funcionarios involucrados y hacen que muchos casos sigan en la impunidad.
La embajada estadounidense asegura que “Guatemala ha hecho esfuerzos por frenar el flagelo, pero hace falta ejecutar otras acciones para erradicarlo”.
Leonel Dubón, de la Asociación Refugio de la Niñez, asegura que es importante la captura de estas personas porque comprueba que el flagelo continúa, en especial en las fronteras con México.
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Raúl Barreno/ Agencias