Infografía: Wendy Morataya
Durante más de cuatro días vecinos bloquearon el paso en La Democracia y la aldea La Mesilla, frontera con México, debido a que, según ellos, más de seis mil personas, de 12 municipios, no tienen servicio eléctrico, por supuestos sabotajes que han sufrido las líneas de distribución.
Entre las medidas de presión que tomaron los pobladores estuvo tomar como rehén al alcalde local, Mauro Cobón, durante dos días y ayer lo liberaron a las 12 p. m.
Lo pobladores aseguraron que “Energuate ha adoptado estas medidas para no prestarles el servicio”, lo que desmintió la empresa.
Los pobladores le exigieron al gobernador de Huehuetenango, Antonio López, que se reestablezca el servicio de energía y ofrecieron hacerlo por 20 días más e instalar una mesa de dialogo.
Energuate ha denunciado en diversas oportunidades que muchos de los usuarios están conectados en forma ilegal.
El Gobierno ha señalado en el pasado a diversas agrupaciones como promotoras de los conflictos, ya que “cobran por el servicio, bajo el engaño de que esta se va a nacionalizar”.
El ministro de Gobernación, Mauricio López, aseguró que “las personas están actuando al margen de la ley y tomarán las medidas necesarias para retomar el control del área”.
Criticó que se hubiera plagiado al edil y que lo agredieran. Por ahora Cobón permanece en un centro asistencial de la cabecera de Huehuetenango.
Gerson López, secretario ejecutivo de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), explicó que la conflictividad es preocupante, porque “un vecino que no pague su factura afecta a otros que sí lo quieren hacer”.
Las cifras de Energuate revelan que los departamentos en los que hay conflictos por conexiones ilegales son principalmente San Marcos, Huehuetenango, Quiché, Retalhuleu y Suchitepéquez. El 41% de clientes de Energuate está en San Marcos, mientras que en Huehuetenango hay 26%.
Raúl Barreno Castillo y Agencias
