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La violencia y la criminalidad llegaron a un punto de estancamiento en Guatemala, según el último informe del Grupo de Apoyo Mutuo (GAM).
“En ningún mes, de los nueve que han transcurrido, se ha reportado descenso en comparación al año anterior”, según el grupo.
Agregó que los robos, asaltos y “otro tipo de delitos” propician un aumento en la sensación de inseguridad.
En ese periodo, las muertes totalizaron 4 mil 647 personas, en donde el promedio fue de 516.33 casos mensuales, contra 490 en el año anterior.
En cuanto a los menores de edad de ambos sexos, el incremento de heridos y fallecidos corresponde al 4.5%, de forma especial en las niñas menores de 15 años.
Hasta en septiembre, hubo 27 niñas muertas y 27 heridas, contra 41 varones fallecidos y 21 heridos.
De acuerdo con el reporte, la zona 18 capitalina cerrará el año “con los índices más altos de muertes violentas”, a pesar del trabajo de la Fuerza de Tarea Maya del Ministerio de Gobernación. En el lugar, murieron 75 personas. A esta, le siguen la zona 7 (43) y la 6 (41).
Al respecto, el jefe de esa cartera de Estado, Mauricio López, pidió a los investigadores mayor profundidad en el análisis de sus datos. Esta es una de las zonas con mayor concentración de habitantes: 500 mil.
Respecto de las armas que se emplean con mayor recurrencia, las de fuego encabezan la lista, con 83.65%; seguidas de las blancas (7.72%) y los estrangulamientos.
En el interior, Escuintla es el departamento con la mayo tasa de muertos (99) por cada 100 mil habitantes. A esta le siguen Chiquimula (98) y Zacapa (90).
Finalmente, Guatemala puntea como el municipio con mayor violencia (429 delitos), seguida de Villa Nueva (24); y Mixco (18). El resto de ciudades reporta casos inferiores a cuatro.
Juan José López Torres
