SIT "no fue concebida como megaregistro" de celulares, CIEN

Gobernación

Si el registro guatemalteco de automóviles tiene falencias para llevar controles de robos, uno para la Superintendencia de Telecomunicaciones (SIT) sería más complicado, indicó el Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN) esta mañana.

Así lo manifestó Francisco Quezada, investigador del Área de Seguridad Ciudadana del CIEN, durante la presentación de recomendaciones para reducir el robo de teléfonos móviles en el país.

Esto “es como cuando se legisla sin investiga en el campo: se le están delegando funciones a la SIT pero no se le está asignando presupuesto. La SIT no fue concebida como un megaregistro (de celulares)”, aseguró Quezada.

Por ahora, se encuentra en discusión la Ley de Registro Móvil para la Prevención y el Combate del Delito (iniciativa 4507) en el Congreso, con la que se busca implementar medidas que reduzcan este problema mediante el registro de aparatos.

Esta ley pretende darle a los consumidores nueve meses para registrar su teléfono ya que, al finalizar ese plazo, se les bloquearán si no lo efectuaron. Empero, eso “es imposible”, según el CIEN, puesto que implicaría que unas 77 mil personas acudieran a diario a la Superintendencia.

PROBLEMA GLOBAL

Solo en 2012, cada día se robaron 391 aparatos que, en otras palabras, significa 925 terminales por cada 100 mil habitantes, o 142 mil 745 unidades. Estas cifras ubican a la nación con Colombia (3,986), Venezuela (4,571) y Bolivia (7,197), como los de mayor incidencia a escala global.

El CIEN destacó que se trata de un problema mundial ya que entre sus registros figuran Nueva York (186), el Reino Unido (153) y México (139), aunque con menores cifras.

Para combatir el robo y contrabando, existen tres vías: la existencia de una “lista negra” en la base de datos la SIT, grupos policiales dedicados y un acuerdo de las telefónicas para compartir datos sobre los aparatos con otros países.

SUGERENCIAS

Sin embargo, el CIEN consideró que es imperante, en primera instancia, la efectividad de la ley para castigar a quien robe, compre o modifique un celular robado.

Asimismo, ve necesaria la adquisición de un programa informático con la capacidad de relacionar el IMEI con el aparato para inutilizarlo después de un robo.

Al respecto, Bismarck Pineda, investigador del centro, indicó que tanto Apple como Samsung trabajan en alternativas que permitan a los usuarios bloquear un celular robado mediante una cuenta personal.

“Al final no es un tema que solo compete a las telefónicas, ni a las autoridades, sino también a las personas. Urge que el sistema de estadísticas (de robos) se fortalezca”, indicó.

El centro exhortó además a los ciudadanos a no practicar la compra de teléfonos robados ya que, en muchos casos, estos le costaron la vida a una persona.

Juan José López Torres

DATOS

1. Un smartphone de última generación cuesta Q6,000 aproximadamente
2. La mayoría de robos quedan impunes porque no se denuncian
3. Para 2012, habían 20.8 millones de aparatos, 95.2% era prepago
4. La SIT reportó 142 mil 745 robos o hurtos