Guatemala superó una prueba del Fondo Monetario Internacional (FMI), ya que esta entidad considera que las variables macroeconómicas son estables y hay crecimiento.
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Lorenzo Figliuoli, uno de los representantes de esa misión del ente financiero internacional que visitó el país, explicó que espera que Guatemala mantenga su crecimiento por encima del 3% gracias a la demanda interna y el sector privado.
La inflación se mantendrá en la mitad superior de los objetivos de Banco Central en 2013 y 2014, después de subir más de medio punto en abril de este año hasta superar el 4%, aún dentro de los límites marcados por las autoridades”, agregó Figliuoli.
El FMI espera que el crecimiento pase del 3% de 2012 y se incremente al 3.5% entre 2013 y 2014, alcanzando su potencial, apoyado en la aún “boyante” demanda y el saludable crédito del sector privado.
Esta entidad destacó que el déficit por cuenta corriente mermará, mientras se detalló que el régimen de reducción del déficit fiscal es más lento al deseado.
Los riesgos para Guatemala persisten y están vinculados con un posible contagio de un “frenazo” en la economía estadounidense, que además podría afectar al volumen de remesas.
Se está en buen camino, pero hay que tomar en cuenta que para progresar se debe elevar la tasa de recausación tributaria. Nosotros apoyamos la reforma fiscal”, añadió.
Políticas
Esta entidad considera que las acciones en contra de la reforma fiscal son un retraso.
• Déficit. “Para que un país se desarrolle se necesita una reforma fiscal. Las impugnaciones en contra de esta normativa han mermado la recaudación y esto produce el vacío fiscal”, explicaron las autoridades del FMI. Además, aseguraron que la ley de competitividad debe ser aprobada, ya que concede incentivos fiscales “nada despreciables” en el mediano plazo.
• En contra. Consideran que los aumentos continuados en la carga de la deuda pública constituyen una fuente de vulnerabilidad. También aseguraron que apoyan la política monetaria y que la reforma a esa norma debe mantenerse enfocada en el anclaje de una inflación baja y estable. “La economía está en buen camino”, explicaron.