Lester Godínez Orantes es un polifacético músico autodidacta. Nació en Taxisco, Santa Rosa, el 29 de marzo de 1953.
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Es Licenciado en Música y se ha desempeñado en distintos campos de la cultura y la música, incluido investigación, composición, interpretación y docencia.
Tiene más de 50 años de experiencia en la proyección artística nacional e internacional de la marimba guatemalteca.
Lleva más de 40 años trabajando para dignificar la marimba, permitiéndole crear el concepto “Marimba Nacional de Concierto”, con el propósito de que el público permanezca sentado y aprecie la música.
En una entrevista, platicamos sobre la posición de marimba en la actualidad, cómo ha evolucionado su gusto en las generaciones y sobre todo, el valor que se le ha dado en distintos ámbitos.
- ¿Qué significa para usted la dignificación de la marimba?
El rol que va ocupando en la sociedad es el de amenizar eventos, pues se ubica al instrumento en el rincón del salón de baile, en el cual, la marimba y el marimbista o intérprete no necesariamente reciben el reconocimiento y valoración como elemento de identidad y de orgullo para la sociedad guatemalteca.
En 1960, se impulsaron algunas medidas, tales como:
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- Reeducar al escucha: ¡La marimba y el marimbista merecen toda su atención, aprecio y justa valoración!
- Una autotransformación del marimbista hacia una mejoría en su formación musical y su profesionalismo.
Como Entidad Musical, la marimba adquiere funciones tales como estudio, investigación, rescate, desarrollo, promoción y difusión.
El 10 de mayo de 1970 propuse el concepto que propiciaría el surgir de una nueva etapa para el instrumento que más tarde se difundiría como el concepto de Marimba de Concierto.
Esto de sustentaba con 2 postulados fundamentales: La Dignificación de la Marimba como Instrumento de Concierto y la Dignificación del Marimbista, poniendo en valor sus cualidades artísticas.
- ¿Cuál es su opinión sobre la evolución del gusto por la marimba a través de las generaciones?
Considero que la Dirección General de Educación Estética contribuyó notablemente a despertar el interés de los jóvenes haciendo un excelente trabajo en el sector escolar (primaria y secundaria), mediante el fomento de las materias de música, artes plásticas, danza y teatro.
Aunque la institución ya no esté, me parece excelente la labor que hacen los maestros de Educación Musical y el apoyo de instituciones escolares privadas y estatales, pues contribuyen notablemente en despertar el gusto de las nuevas generaciones por la marimba.
Apreciación del músico
- ¿Cómo ve que ahora los jóvenes quieran incluir la marimba y mezclarla con distintos géneros musicales?
Es una satisfacción para mí y para mi trabajo; recuerdo que en 2013 una institución bancaria impulsó un concurso para que los jóvenes incluyeran a la marimba en sus agrupaciones musicales juveniles.
Ello demostró que la marimba puede jugar un rol importante en el gusto por el instrumento, en las nuevas generaciones.
- ¿Qué hace falta para que la sociedad le inculque a los jóvenes y niños el valor de la marimba?
Lo más importante es el trabajo de instituciones públicas y privadas para obtener grandes resultados en los que se alcance un gusto especial por la marimba en jóvenes y niños. Asimismo, se requiere impulsar actividades, festivales, conciertos en los que la marimba ocupe un lugar preponderante y protagónico.
- ¿Qué opina sobre el hecho que los estudiantes ahora quieran aprender a tocar marimba como una materia extracurricular?
El apoyo de las instituciones educativas es primordial para que se valore nuestro instrumento nacional.
Ha ocurrido incluso en algunas universidades privadas, en las que es obligatorio incluir un curso de arte y uno de deporte. Y precisamente para cumplir con el requisito del curso de arte, se han decidido por aprender a tocar marimba.
Lo mismo ocurre especialmente en colegios privados, en los que los estudiantes se interesan en aprender y tocar la marimba.
- ¿Qué cambios ha tenido la marimba en la actualidad?
Considero que el concepto Marimba de Concierto ha contribuido notablemente a sembrar en la sociedad, un mayor respeto y aprecio por la marimba, así como por el trabajo que desarrollan los maestros que fabrican la marimba (marimberos) y los que la interpretan (marimbistas).
