A los 14 años, la cantante guatemalteca Fiorella Melini sufrió un accidente en una moto de playa y el escape le provocó quemaduras de tercer grado en varias partes de su cuerpo.
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"Pasé tres meses en el hospital y me tuvieron que realizar 28 cirugías reconstructivas. Fue un proceso muy doloroso y de muchas complicaciones".
La intérprete reveló que superó los traumas que le dejó el incidente gracias al apoyo de su familia, el apoyo psicológico y por medio del arte.
"El arte fue mi refugio y mi medio de catarsis. Mi desahogo asertivo y donde encontré un lugar donde encaje", indicó.
Tras superar sus miedos, Fiorella compartió su experiencia y se animó a mostrar las cicatrices en su cuenta de Instagram.
"Elegí a través de la fotografía hacerme consciente de cómo me veo y a través de la metáfora del ave Fénix compartir mi historia al mundo", reveló.
En las imágenes, que fueron tomadas por Carlos Silva, ella aparece desnuda enfocándose en las cicatrices y en que la belleza va más allá del físico.
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Según sus palabras, ella quiere demostrar que la belleza tiene muchos significados y formas de entenderse.
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"Yo he logrado cambiar conceptos que me dañaban sobre lo que me hace bella y valiosa ante los demás", indicó.
Durante este proceso, la cantante nacional descubrió que todos pasan procesos difíciles que dejan lecciones y que eso la motivó a compartir.
Desea ser la voz de las personas que estén atravesando por momentos difíciles y darles una palabra de aliento y decir que sí se puede y vale la pena.
"Quiero motivar a mas personas a que se quiten las ataduras superficiales y encuentren algo que les permita liberarse. En mi caso fue el arte. Para muchos otros podrá ser el ejercicio, la cocina u otras actividades. Pero ninguno estamos a vivir en incertidumbre u oscuridad por sucesos que marcan nuestro pasado. Podemos salir adelante", finalizó.
