En 2017 se presentó la serie "Ingobernable", en la que Emilia Urquiza, la primera dama de México, es una mujer de convicciones fuertes, pero cuando pierde la fe en su marido, necesitará toda su fortaleza para descubrir la verdad.
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Para la segunda temporada seguirá siendo fugitiva, madre y justiciera, pero ahora tendrá una ventaja: Sabrá quién es el enemigo.
Publinews Internacional conversó con la actriz mexicana Kate del Castillo, la protagonista de la serie cuyos nuevos episodios ya puedes ver en "Netflix".
¿Qué debemos esperar de la segunda temporada de "Ingobernable"?
Las grabaciones han sido muy duras. La segunda temporada se viene bastante intensa. Mis horarios de rodaje iban de lunes a sábados, así que ya te imaginarás cómo está todo. Mi personaje requiere mucho entrenamiento físico. Es una mujer aguerrida que sigue luchando por su paz y la verdad.
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¿Crees que hacen falta más papeles como el tuyo en la televisión Latinoamericana?
Es hermoso que cada vez más escritores estén creando historias con roles femeninos mucho más atractivos. Yo estoy muy agradecida en ese sentido porque Emilia es una mujer compleja, con muchas capas.
Y es una líder…
Una como actriz siempre cuida al milímetro los personajes que acepta. Hay muchos roles femeninos por ahí que utilizan su sexualidad para tener poder, pero ese no es el caso de Emilia. Ella es poderosa porque es inteligente.
¿Cómo veremos a Emilia en los nuevos capítulos?
Desde que muere el presidente, su esposo, hasta que termina la primera temporada, solo pasaron quince días. Todo pasó muy rápido. Por eso, la historia de Emilia tendrá un nuevo arco argumental y nuevos personajes entrarán a su vida para atormentarla a ella y al país.
Por medio de estos personajes, la serie habla sin descaro de la corrupción en México, ¿qué te produce eso?
Estamos en Netflix. Podemos hablar de todo. Sí nos pegamos mucho a la realidad del país. Por ejemplo, tocamos el tema de los 43 estudiantes desaparecidos. Sin embargo, estos casos mexicanos pueden extrapolarse tranquilamente a cualquier país latinoamericano. Pero, vamos, al final del día es ficción.
Texto: José Barreto/Publinews Internacional
