La irlandesa Dolores O’Riordan, vocalista del grupo The Cranberries, murió repentinamente el lunes 15 de enero, a los 46 años, en Londres.
PUBLICIDAD
La cantante, que escribía las letras del grupo, “estaba en Londres para una corta sesión de grabación”, precisó su agencia Lindsey Holmes Publicity en un comunicado, sin precisar las causas de la muerte.
En este artículo te presentamos cinco momentos que demuestran la intensidad con la que la cantante irlandesa se convirtió en una figura mundial.
Infancia en una área agrícola
Dolores Mary Eileen O’Riordan nació en 1971. Vivió en un área agrícola, en una casa pequeña con tan solo dos habitaciones para los nueve integrantes de la familia. Esta trabajaba y vivía de sus cosechas.
Cantaba desde su niñez
PUBLICIDAD
En 1974 era común verla cantando por todos los rincones de la casa, del colegio y de la iglesia. A partir de los 5 años, empezó a cantar y a tocar el órgano en la iglesia. Entonaba canciones tradicionales e himnos eclesiásticos.
Un inicio místico
El álbum debut de The Cranberries, “Everybody Else Is Doing It, So Why Can’t We?”, fusiona el pop-rock tradicional británico de finales de los ochenta, con el folk y los ambientes místicos irlandeses.
Encuentra su voz
En 1994, The Cranberries publicó el álbum “No Need to Argue”, en el que abordaron el tema de las víctimas de guerra, en especial los niños, en “Zombie”, canción que se convirtió en un himno de protesta durante los noventa.
Personalidad bipolar
En 2014, O’Riordan capturó toda la atención de los medios de la farándula por haber agredido a una azafata durante un vuelo de Nueva York a Irlanda. Poco tiempo después fue diagnosticada con trastorno bipolar.