Un domingo de julio de 2015, el cuerpo de un joven apareció flotando en la piscina de la mansión de Beverly Hills de la actriz Demi Moore.
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A las 5:30 de la mañana fue encontrado el cuerpo en el domicilio de la estrella de Hollywood.
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La policía se llevó una sorpresa al darse cuenta de que la residencia era propiedad de Demi Moore, quien no se encontraba en el domicilio al momento de la tragedia.
La investigación reveló que un asistente de Demi, que se había quedado a cuidar la casa, organizó una fiesta con amigos la noche anterior y que Edenilson Valle había resbalado sin que nadie se percatara del accidente.
A través de un comunicado Demi indicó
“Estaba fuera del país, viajando para encontrarme con mis hijas para la celebración de un cumpleaños cuando recibí esta noticia devastadora. La pérdida de un chico es una tragedia impensable, así que mi corazón está con la familia y amigos de este joven”.
Y sostuvo que nunca más volvería a hablar del caso.
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La demanda
Tras dos años de la tragedia, la actriz tendrá que hablar, pero esta vez frente a un tribunal, esto porque la familia del joven acaba de demandarla y piden una importante suma por resarcimiento económico.
Las pruebas periciales habían indicado que la actriz no tenía ninguna responsabilidad en la muerte de Valle, ya que no estaba en su domicilio y la fiesta se había organizado sin su autorización.
“Se tomaron grandes cantidades de alcohol y ningún testigo recuerda haberlo visto caer”, indicó el investigador.
Pero los padres del joven fallecido han insistido en que se incluya a la actriz en la demanda argumentando que no había ningún tipo de señalización que informara de la profundidad de la piscina y la temperatura en la que se encontraba el agua.
Cabe indicar que su asistente, el que organizó la fiesta quedó libre de cargos.
