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No hay que decirse mentiras: Johnny Depp, hasta que dejó a Vanessa Paradis, seguía siendo el mismo símbolo sexual que conquistó a las mujeres durante más de dos décadas. Eso fue hasta 2012. Y se le perdonaba todo: que no se bañara, que pareciera una copia de Steven Tyler y que hiciera de sí mismo siempre.
Hasta que se casó con Amber Heard y 15 meses con ella. Y para el año pasado, sus dientes espantaban a toda aquella que alguna vez soñó con besarlo por ser Jack Sparrow o Ichabod Crane:
De un día para otro, Depp cortó su melena bohemia. Luego comenzó a engordar. Y los dientes, que los tenía parejos (porque se veía así incluso en “Piratas del Caribe”), comenzaron a verse descuidados y hasta negros.
El actor ya había sorprendido en el Festival de Cine de Venecia del año pasado, donde demostró que ya no es el sex symbol que por ejemplo, hizo que muchas envidiaran la suerte de Juliette Binoche en “Chocolate” (1998):
Pero del gitano conquistador nada quedaba. En Venecia, con varios kilos de más y un outfit que parecía inspirado en el protagonista de “El Hobbit”, el actor se ganó cientos de criticas en las redes sociales, donde la mayoría aseguró que se había descuidado.
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Después de eso, el protagonista de “Piratas del Caribe” volvió a causar polémica con su visita a Río de Janeiro, donde se reunió con Joe Perry (de Aerosmith) y Alice Cooper, sus compañeros en la banda de rock, “Hollywood Vampires”.
Sobre el escenario, Depp se ganó los aplausos del público, pero detrás de él, dejo ver que su adicción al alcohol, sus malos hábitos y alguna que otra operación estética están terminando con el hombre que alguna vez protagonizó portadas y tenía un “no se qué” que se acabó desde hace cuatro años.
En la galería de fotos podrán ver cómo cambió el actor a través de los años. Recuerden que para leer la información desde un smartphone o tablet, seleccionen “ampliar galería” y después “mostrar texto”.
