“Voy a trabajar en esto, pero Dios, cómo lo odio”. El post se volvió viral. Obvio, la despidieron. Se arrepintió terriblemente. Foto: vía Facebook/Kaitlyn Wells
La pequeña bromista de American Airlines: Sarah es una niña holandesa que no tenía nada mejor que hacer y decidió bromear a lo grande en Twitter. Por eso tuiteó a la aerolinea American Airlines cosas como esta: “Soy Ibrahim, soy de Afganistán, y e
La compañía le contestó diciendo que se tomaban muy en serio las amenazas. Rastrearon su IP y esta fue detenida. La niña afirmó que solo quería ser famosa “como Demi Lovato, no como Osama Bin Laden”. Luego del trago amargo que pasó, fue liberad
Nicolás Castro es un joven colombiano que en 2009 fue encarcelado por, supuestamente, crear un grupo hecho para matar al hijo del presidente de entonces, Álvaro Uribe Vélez. Foto: vía Facebook/Liberemos a Nicolás Castro
“Me comprometo a matar a Jerónimo Uribe”, se llamaba el grupo. El joven pasó un buen tiempo en la cárcel hasta que lo liberaron de todos los cargos. Obviamente, se fue de Colombia luego de lo sucedido. Foto: vía Facebook/Liberemos a Nicolás Cast
El que se alegró de la muerte de 33 infantes: En Colombia, el año pasado, se quemó un bus que transportaba a varios niños en el norte del país. El hecho causó luto nacional. Pero no todas las reacciones en Twitter fueron de luto. Algunas, como la de
Tan cara que está la gasolina y desperdiciarla en 32 costeños? tienen huevo (sic)”, escribió Pérez, quien aparecía en Twitter como @_Alejandrop1. También creó este hashtag: #MePrendoComoNiñoEnBus. Las personas se indignaron tanto, que rastrearon
Casi lo matan en la misma universidad a la que iba. De nada sirvieron sus disculpas. Se enfrenta a la posibilidad de pagar hasta 3 años de cárcel. Foto: vía Twitter
Nacho Vigalondo y sus chistes de judíos: Nacho Vigalondo es un famoso director de cine español que en 2011 protagonizó un spot televisivo para el diario “El País”. Una noche, se puso a bromear en su Twitter con un tema tan delicado como el Holocau
Consejo gratis para sobrevivir en el mundo moderno: nunca, pero NUNCA hablen mal de su trabajo en redes sociales. Y mucho menos si ni siquiera han comenzado en este.
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Esto lo aprendió Kaitlyn Walls, madre soltera de 27 años, a las malas. Consiguió un trabajo en una guardería, pero lo odiaba. Así que, careciendo de sentido común, Kaitlyn escribió en Facebook:
“Empiezo mi trabajo hoy, pero odio trabajar en una guardería”.
Error. Alguien vio el post y sus empleadores lo supieron. Así que la despidieron por inbox. No duró nada allí. Ella afirmó, citada por el periódico británico “Metro”, que cometió “un gran error. No odio a los niños, tengo a la mía y la amo”.
También se lamentó en su propia red social: “Cometí un terrible error y estoy muy triste. Me siento fracasada, porque veo a mi hija llorar porque tengo miedo de no ser capaz de encontrar un trabajo por mi propia estupidez“.
En la galería verán casos más graves que el de Kaitlyn. Estas personas arruinaron sus vidas por postear algo que no debían. Para leer la información desde un smartphone o tablet, hagan click en “ampliar galería” y luego en “mostrar texto”.
