Foto. Agencias
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Blair y Morgan McMillann son una pareja de canadienses que desde abril están viviendo en la época de 1986. La razón es porque sus hijos no levantan la vista de los iPhones y iPads, por eso han prohibido en su casa cualquier tecnología posterior a ese año para enseñar a sus pequeños cómo se vivía entonces.
Todo comenzó cuando Blair le pidió a su hijo de cinco años de edad jugar con él en el jardín, pero el niño prefirió quedarse en casa y jugar con el iPad.
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Ahora la familia no tiene Internet o canales de noticias de 24 horas en su casa. En cambio, tienen una tele de 1980 encerrada en un mueble de madera y un radio cassette portátil donde ponen cintas.
Le dijeron adiós a sus teléfonos móviles, mandan las cartas por correo en lugar de enviar mails electrónicos; y llaman a las puertas de la gente en lugar de seguirlos en Facebook.
“Renunciar a todos estos aparatos que hacían nuestra vida tan cómoda no fue fácil. La experiencia nos ha llevado a la familia a sentirnos más cercanas y no ha dado la oportunidad de hablar más unos con otros. Ahora jugar al aire libre es algo que ya puedo hacer con los niños”, indicó Blair.
Para hacer la experiencia aún más realista, Blair se viste como si fuera 1986 y ahora luce un look con bigote.
La familia McMillan planea seguir viviendo así hasta abril de 2014. Además, hasta ahora han ahorrado dinero, ya que no hay facturas de telefonía, televisión o internet que pagar.
Agencias