La jornada 32 de LaLiga tuvo en el Camp Nou uno de los juegos que en la previa se esperaba como el partido de la fecha, el FC Barcelona recibió ante 88 mil 530 espectadores, y una intensa lluvia, al Real Betis, partido que a diferencia de lo esperado solo tuvo un color, el blaugrana. Los de Xavi tumbaron a los de Pellegrini 4-0.
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Con esta victoria el Barça se sacude la presión que le impuso el Real Madrid horas antes con su triunfo 4-2 sobre el Almería. La jornada para los de Xavi terminará como inicio, seguirán líderes con 11 puntos sobre los Merengues. Del otro lado de la ecuación está el Real Betis, que la derrota, con la que no logran romper su mala dinámica, los deja en sexta posición y con opciones de terminar la fecha séptimos, lo que les dejaría fuera de los puestos europeos para la próxima temporada.
FC Barcelona 4-0 Real Betis
El marcador en el Camp Nou se abrió gracias a un cabezazo de Andreas Christensen, quien a centro de Raphinha marcó al minuto 14 su primer gol como jugador del FC Barcelona. Para el central danés la fiesta fue doble, ya que este partido marcó su regreso a las canchas tras un mes de baja por lesión.
Los culés siguieron dominando el encuentro y al 33′ una decisión arbitral terminó de hundir al irreconocible Betis, Edgar fue expulsado por doble tarjeta amarilla, tras un pisotón sobre Pedri, lo que condicionó el resto del plan diseñado en la previa por el ingeniero Pellegrini. Tan solo dos minutos después de la expulsión, el Barça amplió su ventaja con un centro de Jules Koundé que fue rematado a placer por Robert Lewandowski, para poner el 2-0.
El FC Barcelona no bajó el pie del acelerador en la primera mitad, y al 38′ Raphinha se encontró con excelso pase de Busquets, que no desperdició el brasileño para poner el 3-0. El linier dejó sin grito de gol a Raphinha por un presunto fuera de juego, pero tres minutos después el VAR validó el tanto que desató la euforia en el Spotify Camp Nou.
Una segunda mitad aplausos
El Rey del futbol, el gol, no fue el mayor protagonista de la segunda mitad, a pesar de que los culés ampliaran su ventaja definitiva a 4-0, tras un autogol al 83′ de Guido Rodríguez. Lo que dejó marcada la segunda parte fue una serie de ovaciones del público hacia los protagonistas.
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La primera ovación fue a Joaquín en el minuto 63′, el eterno capitán bético ingresó para jugar sus últimos minutos como profesional en el Camp Nou. Para infortunio del veterano extremo, una lesión no le permitió terminar el encuentro, y al 80′ se marchó al banquillo dejando a su club con 9 hombres, ya que los de Pellegrini no tenía más cambios.
Además de los aplausos al capitán del equipo rival, el Camp Nou también ovacionó al 72′ el ingreso de Ousmane Dembélé. El futbolista francés no veía minutos desde febrero en liga por una lesión, que también lo dejó al margen de la llave ante el United, en Europa League; y las semifinales de la Copa del Rey, ante el Real Madrid; fases en las que los de Xavi fueron eliminados. El último gran apoyo del público lo recibió Lamine Yamal, el juvenil del Barça debutó con 15 años en el minuto 83′.
