Con gran euforia, así celebró el badmintonista guatemalteco, Kevin Cordón, su segunda victoria en el grupo C de los Juegos Olímpicos de Tokio, luego de imponerse a Angus NG Ka Long, de Hong Kong.
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El partido, que se llevó a cabo en el Musashino Forest Sport Plaza, terminó 2-0 a favor del zacapaneco, con parciales de 22-20 y 21-13, logrando así su pase a los octavos de final donde se enfrentará al neerlandés Mark Caljouw.
Entre lágrimas, Cordón habló de las claves del triunfo finalizado el encuentro y se mostró muy contento y emocionado por su pase a los octavos de final tras culminar como líder del Grupo C.
Las palabras de Kevin
“Contento por la victoria, hoy en la mañana analizamos algunas cosas del contricante, se tenía la idea de sus puntos fuertes y contrarrestar los puntos fuertes que él tenía, partido disputado, yo le dije a mi entrenador que iba a pelear cada punto, no voy a pensar que voy a ganar o a perder, no voy a pensar quien está del otro lado de la cancha, yo cada punto lo disfrutaba lo celebraba y cuando me di cuenta ya estaba en el punto 19 del segundo set y ahí si me entraron las ansias, pero al final creo que el se puso un poco más nervioso que yo”, señaló Cordón.
Cordón resaltó las claves del triunfo ante su rival, donde recalcó que nunca se puso a pensar en cuanto iba el marcador o lo que hacía el otro rival, Kevin solo se concentraba en sacar los puntos.
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“Yo nunca estaba pensando cuantos puntos me faltaban para ganar el partido, yo solo estaba concentrado en mi juego, su marcador o mi marcador, yo solo estaba jugando y jugando, claro habían momentos que ahí se aplica la estrategia con ciertas mañas cuando sacan, pero hasta ahí nada más”, afirmó Cordón.
“El momento clave fue la sorpresa de él, nunca me había visto jugar, entonces él en los primeros puntos me analizaba y a mi me pasó lo mismo, entre la guardia y el análisis él se soprendió que yo tomé la iniciativa desde un prinicipio, entonces creo que eso marcó la diferencia durante todo el partido”, señaló el medallista panamaricano guatemalteco.
Sobre las lágrimas al final del encuentro, Kevin, señaló que es un cúmulo de emociones y que son lágrimas espontáneas que salen al momento de celebrar tras lograr un importante triunfo.
“Valió la pena tantas horas de entrenamiento, tanto sacrificio, tantas cosas que le pasan a uno no solo como deportista, sino que también en la parte humana, entonces todas esas emociones se le vienen a uno y pues las lágrimas son inevitables, son espontáneas, vienen todos esos bonitos pensamientos o cosas difíciles que uno tuvo que pasar para estar acá”, concluyó.
*Con información de CDG