El dirigente Dietmar Hopp ha recibido grandes muestras de repudio, pero puede tener la vacuna contra el COVID-19.
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Se trata del presidente del Hoffenheim de Alemania, quien además es uno de los hombres más poderosos del mundo.
A Hopp lo odia la mayoría de aficionados alemanes, pero es accionista de la empresa que estaría cerca de encontrar la vacuna contra el virus.
El odio contra Dietmar Hopp
Según el portal alemán “Dier Spiegel”, Hopp financia la empresa CureVac, que está cerca de encontrar la posible vacuna.
Además, él es una de las personas más poderosas del mundo, con una fortuna de más de 5 mil 300 millones de euros.
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Pero recientemente pasó a ser una de las personas más odiadas por las aficiones del Borussia Dortmund y el Bayern Munich.
Esto, porque se mostró en contra de una cláusula 50+1.
Dicha cláusula se basa en proteger a clubes sobre los accionistas externos, dándoles a los socios la posibilidad de controlar la mayoría de los votos a la hora de tomar decisiones.
Dietmar recibió fuertes críticas y amenazas de parte de varios grupos de ultras que corearon su nombre desde las gradas.
Mientras, los futbolistas en protesta, decidieron no “lastimarse” en los últimos 15 minutos del juego.
Esto ocurrió en el partido entre el Hoffenheim y el Bayern de Munich.
La cura contra el coronavirus
Sin embargo, el odio podría pasar a admiración, luego de que se conoció que Hopp es uno de los máximos accionistas de CureVac.
Se trata de una compañía que estaría en las últimas fases respecto a la búsqueda de la cura contra el coronavirus.
Según el “New York Times”, Hopp no está interesado en vender la posible cura, pues quiere ayudar a la gente de la región y al resto del mundo.
“Queremos desarrollar una vacuna para proteger y ayudar a pacientes de todo el mundo y no para países individuales”, dijo.
“Tenemos confianza en que podremos desarrollar una vacuna potente en los próximos meses”, aseguró la compañía.