La justicia de Panamá imputó cargos a tres jugadores del Sporting de San Miguelito, equipo de la primera división local, por presuntamente secuestrar a un chino, que aún no ha sido liberado, informó este miércoles la Fiscalía panameña contra la Delincuencia Organizada.
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El juez ordenó la detención provisional de Luis Mendoza, Kevin Schuartz y Dámaso Santos por los delitos contra la libertad individual (secuestro) y contra el orden económico (uso indebido de tarjetas de crédito) en perjuicio de un joven de origen chino en Ciudad de Panamá.
Según un comunicado de la fiscalía, "la víctima se mantiene aún bajo secuestro desde el mes de febrero".
El fiscal contra la Delincuencia Organizada, Jairo Samaniego, presentó como pruebas contra los futbolistas "diligencias de allanamiento, informes de líneas telefónicas, estado de cuentas de las tarjetas de crédito", entre otros.
Por este hecho la Fiscalía imputó cargos a una cuarta persona vinculada, aunque no dio más detalles.
El Sporting de San Miguelito, equipo representativo de un populoso distrito contiguo a Ciudad de Panamá, condenó los hechos en otro comunicado y manifestó que colaborará con las autoridades.
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"Reiteramos nuestra condena a todo acto de delincuencia en nuestra sociedad, por lo que colaboraremos con las autoridades correspondientes en todo lo que nos sea posible y desvincular de nuestra institución a dichos jugadores, hasta que se esclarezca lo sucedido", dice la nota del Sporting.
Durante los últimos años jugadores de fútbol panameños se han visto involucrados o envueltos en diversos actos delictivos.
Hace casi un año el jugador de la selección panameña, Amílcar Henríquez, fue acribillado a balazos.
En 2011, el arquero del Plaza Amador Eric Luna también fue asesinado a tiros cuando se encontraba conversando frente a su casa.
Ese mismo año, Abdul Chiari, exinternacional y ayudante técnico del Árabe Unido, fue asesinado cuando se dirigía al entrenamiento del equipo.
La misma suerte corrió el futbolista Javier de la Rosa, del equipo Chorrillo, muerto de varios disparos a las afueras del estadio donde minutos antes su equipo había jugado.
El arquero exinternacional Óscar McFarlane fue arrestado por presunta posesión de droga y homicidio, aunque por este último caso fue absuelto.
A su vez, el delantero José Luís Garcés fue condenado en 2005 por el delito de tentativa de homicidio, el mismo año en que el exdelantero del Árabe Unido Kairo Óscar Martínez fue detenido por la policía en posesión de una ametralladora mini Uzi.
