A ambos “les encanta tener el control“, aseguró Dennis Rodman, exjugador de la NBA y excompañero de Michael Jordan en los Chicago Bulls, refiriéndose a Donald Trump y a Kim Jong-un.
El otrora basquetbolista se dice convencido de que ambos líderes “son más o menos lo mismo” y que las amenazas de guerra nuclear entre Estados Unidos y Corea del Norte no son más que un inofensivo “espectáculo“. “Nadie tiene el dedo sobre el botón“, asegura.
En un momento en que aumenta la tensión entre Pyongyang y Washington, el exjugador de 56 años de edad se presenta como un autoproclamado pacificador internacional, dispuesto a “dar su vida” para que ambas partes lleguen a un acuerdo.
[metroimage ids=”10-34945″ description=”” align=”” imagesize=”large” design=”” link=”” target=””]“Dinámica totalmente diferente“
Rodman llegó a China el lunes, tras hacer escalas en Tokio y en el territorio estadounidense de Guam. Esperaba poder organizar un viaje a Pyongyang, ciudad que ya ha visitado en cinco ocasiones, pero se vio bloqueado por una orden estadounidense que prohíbe a sus ciudadanos viajar a ese país.
Según el propio exdeportista, está intentando obtener “un pase especial” de Trump para visitar Corea del Norte a principios de 2018. Una vez allí, quiere rodar un documental y escribir un libro sobre su relación con Kim Jong-un.
Para Rodman, su presencia puede ayudar a “aliviar la presión en lo que concierne a la comunicación” entre Estados Unidos y Corea del Norte.
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— Dennis Rodman (@dennisrodman) December 6, 2017
Asegura que durante uno de sus viajes en 2013 y 2014, antes de que Trump llegara a la Casa Blanca, el líder norcoreano le pidió que transmitiera tres peticiones al gobierno de su país, y que si no lo hizo fue porque el líder asiático le advirtió que ejercer de mediador podría representar un peligro para él.
[metroimage ids=”10-34947″ description=”” align=”” imagesize=”large” design=”” link=”” target=””]“Todo este asunto conmigo, Kim y Donald Trump, tiene ahora una dinámica totalmente diferente“.
Según Rodman, quien se refiere a Jong-un como “el mariscal“, afirma haber practicado juegos etílicos, cantado karaoke y montado a caballo con el líder norcoreano de 33 años, quien lo considera su “amigo para siempre“.
