Tras semanas de rumores y declaraciones envenenadas, Floyd Mayweather Jr. y Conor McGregor estarían a punto de trasladar, de forma oficial, su feudo verbal a un cuadrilátero.
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Esto, después de que el periódico The Irish Sun informara que, tanto el campeón invicto de boxeo como la estrella de las artes marciales mixtas, han llegado a un acuerdo para cerrar la pelea, bajo un estratosférico contrato.
Aunque aún faltan las firmas, ambas partes estarían de acuerdo en todos los detalles y el combate podría anunciarse en los próximos días.
Según el medio irlandés, McGregor viajó a Estados Unidos para rodar un anuncio de una campaña contra el acoso escolar (tras el castigo de la Comisión de Deportes de Nevada por un incidente con Nate Díaz en una rueda de prensa) y durante su estadía se reunió con fuentes cercanas a Mayweather.
"Me gusta la Comisión de Las Vegas. Iremos para alcanzar un acuerdo. Volaré allí y lo fijaré. Tendré mi licencia en la Comisión de Boxeo de Las Vegas y entonces veremos dónde diablos está Floyd", dijo el peleador irlandés antes del viaje.
La semana pasada, "The Notorius" ilusionó a sus fanáticos al compartir un video en el que participa en un entrenamiento de boxeo.
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Por su parte, "Money" Mayweather, que se retiró con un invicto de 49-0, se ha referido a su posible próximo rival con su característico estilo desafiante, menoscabándolo en las redes sociales.
"Antes de preguntar por $25 millones, asegúrate de valer más de $25 millones. Tienes bien el '2' y el '5', pero quisiste decir $2.5 millones, no $25 millones", escribió el boxeador, haciendo referencia a la primera oferta que recibió para cerrar el combate (25 millones de dólares) y al supuesto valor neto de McGregor (2.5 millones de dólares).
Además, afirmó que solo volvería a pelear si los organizadores le ofrecían una cifra de 100 millones de dólares.
"Es lo único que me interesa de un enfrentamiento con McGregor. Soy un hombre de negocios y sería una idea apetitosa en términos financieros", declaró el boxeador estadounidense a la cadena ESPN.
Si la pelea está pactada, como apunta la prensa irlandesa, significaría una auténtica explosión mediática para el deporte, convirtiéndose en una de las peleas más anticipadas de todos los tiempos.
