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Más de mil niños, quienes junto con su familia residen en las comunidades cercanas al lugar que se encuentra a 15 kilómetros del municipio de Alta Verapaz, recibieron esta Nochebuena la visita de los dos seleccionados de marcha atlética.
Erick Barrondo y Mirna Ortiz dejaron por un momento los tenis y la pista para trasladarse a otro escenario en el que compartieron con los pequeños un espacio de sonrisas al lado del colorido de los juguetes que repartieron.
Niños que corrían de un lado a otro junto con quienes en los brazos de sus padres no podían ocultar su alegría por la visita y poder jugar con un carrito, una muñeca, una pelota o un oso de peluche en esta Navidad.
“Es como si hubiera venido Santa Claus”, dijo doña Virginia, madre de Karlita, de 4 años, de quien dijo nunca antes estrenó un juguete en Navidad, “muchas gracias a don Erick“, agregó.
El recorrido de más de tres horas por las comunidades, los marchistas estuvieron acompañados por Bernardo Barrondo, padre del medallista de plata en Londres 2012, los miembros de la Red de Jóvenes de San Cristóbal Verapaz, y Bárbara Leal, miss teen San Cristóbal, quienes fueron los encargados del transporte y de repartir los juguetes.
“Este es el final de un Ciclo Olímpico en el que la medalla más importante es la del cariño de los niños“, dijo Mirna Ortiz, esposa de Erick, y dueña del récord nacional en los 20 kilómetros (1:28.31).
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La visita tuvo momentos varios momentos especiales que captaron la atención de los organizadore como cuando se encontraron en la aldea Chirisam con la pequeña Ericka Sofía Xuná, de 5 años, quien iba vestida con traje rojo similar al de Santa Claus.
“Este es un momento en el que tenemos la oportunidad de darle otra clase de alegría a nuestra gente, con este son cinco años en los que llevamos un momento especial a las comunidades y eso es algo tan importante como ganar una competencia“, dijo Erick.
