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El español Mario Mola se proclamó campeón del mundo de Triatlón el domingo tras realizarse la última competencia del serial 2016 en Cozumel, al este de México, que fue ganada de manera dramática por el sudafricano Henri Schoeman.
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Sin embargo, la escena más representativa del evento tuvo lugar a falta de 500 metros, cuando el británico Jonathan Brownlee llevaba la delantera en la competencia y de haber cruzado la meta en primer lugar habría sido campeón del mundo, pero un golpe de calor estuvo a punto de llevarlo al desmayo.
Prácticamente desvanecido, en una escena conmovedora, Jonathan fue ayudado a terminar la competencia abrazado por su hermano Alistair.
Los hermanos Brownlee cruzaron la meta juntos con un registro de 1:47:08 para terminar en el segundo y tercer lugar y le permitieron a Mola convertirse en campeón del mundo, a pesar de haber terminado en la quinta posición con 1:47:36.
En los Juegos Olímpicos de Rio 2016, los gemelos se combinaron para hacer el “1-2”, con Alistair como ganador de la medalla de oro y Jonathan con la plata.
Ambos ocupan los primeros puestos en el ranquin de la Unión Internacional de Triatlón (ITU, por sus siglas en inglés) y fueron aplaudidos por el cierre que protagonizaron en Cozumel en el que la preocupación por la salud y la solidaridad con su hermano pudieron más que el deseo de ganar una competencia.
* Con información de agencias
