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Una acción inaudita ocurrió en el fútbol de España.
La árbitro Marta Galego fue designada para el partido entre la UE Valls ante el Cambrils Unió, en la primera fecha de la Segunda Catalana, que constituye el sexto nivel profesional del balompié ibérico.
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Todo marchaba sin problemas, hasta que un aficionado comenzó a insultar a la juez.
Galego no soportó las agresiones verbales y al minuto 23 detuvo el cotejo para pedir que el espectador se retirara del campo del Vilar.
La juez tomó esa decisión, luego de que el hombre le gritara que se fuera “a fregar los platos, en lugar de dirigir un partido”.
La réferi se respaldó con la normativa de la Federación Catalana de Fútbol (FCF) de “Cero insultos en la grada”; llamó al delegado del UE Valls para que avisara al fanático que tenía que retirarse del recinto por sus comentarios ofensivos y machistas, de acuerdo a medios locales.
El hincha expulsado, socio habitual del combinado local, tardó algunos minutos en retirarse, tiempo en el que el partido se detuvo.
Cuando el aficionado se marchó, el partido se reanudó con una fuerte ovación del resto de los presentes para la tripleta arbitral. Galego optó por reportar el incidente en el acta final.
Las redes sociales no tardaron en reaccionar ante la decisión de Galego. La gran mayoría de los usuarios celebraron la expulsión del aficionado por sus lamentables ofensas:
Por cierto, el duelo finalizó con triunfo para UE Valls 1-0 sobre Cambrils Brió.
