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El tema de la semana en Wimbledon ha sido la lluvia, situación que quedó de lado este martes gracias a la irrupción del profesor de tenis que capturó la atención de todos los fanáticos del tenis.
La historia es increíble, algo similar a lo que interpretó el actor Paul Bettany, quien dio vida al tenista Peter Colt en la película Wimbledon. Sin embargo, lo que protagonizó esta semana el británico Marcus Willis no es un filme, es la vida real.
El jugador británico, que está perdido en el lugar 772º de la ATP, dio la primera campanada al ganar la prequaly para obtener una invitación a las clasificaciones de Wimbledon, el tercer Grand Slam del año.
El zurdo sorprendió a todos y ganó los tres partidos de la fase previa en el césped inglés. Pero no se quedó ahí y en el cuadro principal sacó del camino al lituano Ricardas Berankis, número 54º del mundo. El guión tendría un nuevo actor para su escena final, el antagonista de esta historia es el heptacampeón del major, Roger Federer.
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Este miércoles la película terminó con su derrota ante el suizo. Pero antes de ello hubo emociones al por mayor. Los ingleses no se querían perder el partido y llegaron en masa a alentarlo. Una mini barra para Marcus, que fue ovacionado cada vez que le ganó un punto al considerado por los expertos como el mejor jugador de la historia. Willis, que perdió 25 kilos este año, fue apoyado por su novia en las tribunas, que gritó más que nadie cuando le ganó un game a Federer en el segundo set. El 772º del mundo con eso estaba pagado.
Pero eso no fue todo, el profesor de tenis, que hasta antes del torneo estaba cobrando 30 libras por sus clases, se dio el lujo de hacer delirar a los espectadores cuando humilló a Federer con un globito perfecto, que dejó sin opciones al helvético, quien no tuvo más que aplaudir y reír. La gente estaba feliz con el desconocido jugador, que volvió a probar suerte en el circuito por los consejos de su novia.
Otro dato que muestra la humildad del inglés es que antes del partido se compró ropa de la línea de Federer, precisamente su rival en Wimbledon y quien lo derrotó por 6-0, 6-1 y 6-4 en una hora y 25 minutos de juego.
“Soy suficientemente bueno para jugar aquí. Tengo que trabajar duro y tengo aún que mejorar en muchas cosas, pero es motivador si sigo jugando así”, soltó un emocionado Marcus Willis tras el partido con Su Majestad.
“Me encontraba preparado y he disfrutado del partido. Creo que él ha jugado muy bien. Yo preparé el encuentro pensando que me enfrentaba contra un jugador situado entre los 50 primeros, porque eso es lo que él es ahora, después de esta semana tan particular”, agregó con su humildad de siempre Roger Federer.
Las noticias buenas para Marcus Willis siguen, ya que al finalizar Wimbledon aparecerá cerca del lugar 460º del ranking ATP, gracias a los 70 puntos que ganó por su participación en la Catedral del tenis.
Esta historia continuará…