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Como un proyecto de la empresa de pinturas Paleta, la casa donde creció el guatemalteco Oliverio Castañeda de León fue pintada de nuevo para conservar uno de los lugares más icónicos del Barrio de San Sebastián.
La iniciativa de restaurar el lugar es buscar que se convierta en un museo.
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Gustavo, el hermano de Oliverio, habló sobre la idea de rescatar la casa donde crecieron, ya que considera que es simbólica para Guatemala pero sobre todo para el estudiantado de la Universidad de San Carlos de Guatemala porque ahí creció uno de sus líderes.
Sin embargo, horas después de haber sido renovada fue alterada por personas desconocidas, lo cual ha provocado división de criterios sobre la memoria de Castañeda.
Ahora se pueden observar hojas pegadas con fotos de personas y con leyendas como “víctima del genocidio en Rabinal, B.V”, en referencia a la masacre de 1982.
También hay una frase pintada en grafiti: “Sin justicia no hay paz”, y un corazón pintado con fotos de personas desaparecidas.
¿Quién fue Oliverio Castañeda de León? Fue un líder estudiantil guatemalteco que luchó por los derechos humanos desde su puesto como secretario general de la Asociación de Estudiantes Universitarios de la Universidad San Carlos de Guatemala. Fue asesinado el 20 de octubre de 1978 a los 23 años de edad tras haber acusado al entonces Ministro de Gobernación, Donaldo Álvarez Ruiz, de ser promotor de la ola de terror que se vivía en el país. ¿Cuál es la importancia de la casa donde vivió? Para Guatemala y el estudiantado de la USAC, su casa es simbólica por ser el lugar donde creció uno de los grandes líderes guatemaltecos. Debido a esto, se pretende conservarla para hacer un homenaje a la memoria de Oliverio.
Varias personas en redes sociales apoyaron la idea de renovar la memoria de Oliverio. Sin embargo, para algunos se consideró como un acto que pretendía “borrar” lo sucedido.
“Lástima que algunos “ultra” revolucionarios ya arruinaron la restauración”, comentó un usuario.