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El joven delantero brasileño Vitor Roque está viviendo un notable y contundente renacer en el fútbol de su país, una transformación que lo ha llevado a convertirse en una de las figuras más importantes del Palmeiras.
Este resurgimiento se produce tras un periodo de irregularidad en su paso por el fútbol europeo, donde no logró consolidar su proyección.
Su vuelta a Brasil ha sido un acierto rotundo, ofreciendo una demostración de madurez y eficacia goleadora. Con tan solo 20 años, “El Tigrinho” ha recuperado su mejor forma y, bajo la dirección técnica de Abel Ferreira, se ha vuelto un jugador indispensable para el ‘Verdão’. Las cifras así lo confirman: el atacante suma más de 20 goles oficiales en la temporada, combinando sus actuaciones en el Brasileirão y la Copa Libertadores.
El impacto de Roque ha sido inmediato y fundamental para que el Palmeiras haya asegurado su lugar en la final de la Copa Libertadores, un duelo que podría otorgarle un nuevo título continental. En el camino hacia esta instancia decisiva, el delantero ha dejado actuaciones memorables, destacando su participación en los cuartos de final contra River Plate y su contribución para superar a Liga de Quito. Estos números y su capacidad para marcar y asistir lo han devuelto al radar de la selección brasileña, siendo convocado por Carlo Ancelotti para amistosos recientes.
La prensa especializada y la afición no dudan en calificar su momento como una auténtica metamorfosis deportiva, en la que el joven atacante está demostrando el potencial de un jugador de élite, desmintiendo las críticas que surgieron durante su etapa en España. Ahora, con la final de la Copa Libertadores en el horizonte, Vitor Roque tiene la oportunidad de coronar este renacimiento con un título de prestigio que afianzaría su estatus como una de las promesas más firmes del fútbol brasileño.