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El Gran Premio de Las Vegas de Fórmula 1 se convirtió en un escenario de intenso drama y giros inesperados. Max Verstappen demostró una vez más su temple y habilidad para gestionar situaciones complejas al dominar la carrera de principio a fin, asegurando una crucial victoria en el circuito urbano de Nevada.
Sin embargo, el verdadero sismo que sacudió el campeonato se produjo horas después: la descalificación de los monoplazas de McLaren, pilotados por Lando Norris y Oscar Piastri, por una infracción técnica relacionada con el desgaste del tablón inferior de sus vehículos.
Esta decisión de los comisarios reavivó la lucha por el título mundial de pilotos de manera espectacular, inyectando una dosis de incertidumbre y emoción sin precedentes a falta de solo dos carreras para el final de la temporada. Los 25 puntos obtenidos por Verstappen, sumados a la exclusión de sus rivales, lo colocan en una posición mucho más favorable de lo esperado.
La actual reducción de la ventaja de puntos evoca inevitablemente la dramática y polémica definición de la temporada 2021. En aquel año, Verstappen y Lewis Hamilton (Mercedes) llegaron a la última carrera, el Gran Premio de Abu Dabi, empatados en puntos. Tras un controvertido coche de seguridad en las últimas vueltas, la dirección de carrera permitió un breve período de competición que se redujo a la vuelta final. Verstappen, con neumáticos frescos, logró superar a Hamilton para reclamar su primer campeonato en una maniobra que generó una ola de protestas y discusiones sobre la reglamentación.
Tras el reciente veredicto en Las Vegas, el margen del puntero Lando Norris (McLaren) se redujo drásticamente a tan solo 24 puntos sobre Verstappen. Con 58 unidades aún en disputa (incluyendo la carrera Sprint en el próximo Gran Premio de Catar), la posibilidad de que “Super Max” consiga remontar y aspirar a un nuevo campeonato está más latente que nunca. La F1 ha demostrado, tanto en 2021 como ahora, que el desenlace de la corona puede depender de factores externos al rendimiento puro en pista, manteniendo la emoción hasta el último momento.
El calendario de la Fórmula 1 se dirige ahora al Gran Premio de Catar, una parada que se presenta como una batalla crucial donde cada punto será determinante. La temporada 2025, lejos de estar definida, entra en su fase más emocionante y tensa, prometiendo un desenlace vibrante.