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La selección de fútbol de Cabo Verde consumó una de las mayores hazañas deportivas de su historia al conseguir su clasificación, por primera vez, para la Copa Mundial de la FIFA 2026. El combinado conocido como los “Tiburones Azules” aseguró su boleto al vencer de forma contundente a Esuatini con un marcador de 3-0 en la jornada final de las eliminatorias africanas, garantizando el primer puesto del Grupo D por encima de Camerún, un gigante tradicional del continente.
El triunfo, celebrado como un verdadero acontecimiento nacional, confirma el crecimiento sostenido del fútbol caboverdiano y sitúa a la nación insular en el mapa mundial del deporte. Los goles que sellaron el pase fueron anotados por Dailon Livramento, Willy Semedo y Stopira, desatando una euforia colectiva en el Estadio Nacional y en todo el archipiélago.
Este logro es notable por una característica demográfica que lo convierte en un hito: con una población de aproximadamente 525.000 habitantes, Cabo Verde se convierte en el segundo país menos poblado en la historia en clasificar para una Copa del Mundo, superando a naciones como Trinidad y Tobago (Mundial 2006) y quedando solo por detrás de Islandia, que participó en Rusia 2018. La pasión por el fútbol en este país africano se hizo palpable incluso en la previa, cuando se informó de la venta de entradas a precios simbólicos para asegurar el apoyo masivo.
La gesta del equipo dirigido por el entrenador caboverdiano Bubista (Pedro Leitano Brito) es un símbolo de orgullo y unidad para sus habitantes, y representa un momento cumbre para una nación que celebra medio siglo de independencia. Cabo Verde ahora se prepara para competir con la élite del fútbol mundial, llevando el nombre de su pequeño, pero apasionado país, a Estados Unidos, México y Canadá.