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El FC Barcelona ha recibido la confirmación oficial por parte de la UEFA de que no podrá disputar sus partidos como local de la fase de grupos de la Champions League en el Spotify Camp Nou. En su lugar, el equipo se verá obligado a jugar en el Estadi Olímpic Lluís Companys, en Montjuic.
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La decisión se debe a que las obras de remodelación del Camp Nou no han finalizado a tiempo y el club no ha podido obtener los permisos administrativos necesarios para la apertura y uso del estadio en la máxima competición europea. Aunque se esperaba un regreso al renovado feudo barcelonista, los plazos no se han cumplido, forzando este cambio de sede.
El primer encuentro afectado por esta medida será el crucial partido contra el Paris Saint-Germain, programado para el próximo 1 de octubre. El club azulgrana ya ha comunicado oficialmente que este esperado duelo se celebrará en Montjuic. Si bien la notificación inicial se centra en este partido, todo indica que el Barcelona deberá disputar toda la fase de grupos en el estadio olímpico.
Esta situación representa un desafío logístico y deportivo para el club, que confiaba en poder estrenar su nuevo estadio en la competición de clubes más prestigiosa del mundo.
El FC Barcelona ha emitido un comunicado agradeciendo la comprensión y el apoyo de sus socios y aficionados ante este contratiempo, mientras continúan trabajando para poder regresar a su histórica casa lo antes posible.