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Ante la creciente ola de rumores y acusaciones sobre supuestos beneficios arbitrales y de calendario para Rosario Central, el campeón del mundo, Ángel Di María, ha salido al paso con declaraciones firmes y claras. En una reciente conferencia de prensa, el “Fideo” desestimó categóricamente cualquier tipo de favoritismo por parte del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio “Chiqui” Tapia.
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“Ya estoy acostumbrado a que me metan en todos los problemas”, expresó Di María, refiriéndose a las polémicas surgidas por penales sancionados a favor de su equipo. “Si tuviésemos una ayuda, estaríamos primeros y no habríamos empatado tantos partidos.
Estamos tranquilos con el trabajo que hacemos, no necesitamos la ayuda de nadie”, sentenció el delantero, defendiendo la legitimidad de los resultados obtenidos por el conjunto rosarino en el campo de juego.
Otro de los puntos que generó suspicacias fue la programación de los partidos de Rosario Central, que mayoritariamente no han sido en domingo. Sobre esto, Di María fue tajante y utilizó la ironía para desmentir las versiones: “Yo no elijo los horarios de los partidos. No llamo a ‘Chiqui’ Tapia para decirle ‘quiero jugar los sábados’. Es una decisión de la AFA”.
Con estas palabras, Ángel Di María busca zanjar una controversia que ha manchado su esperado regreso al fútbol que lo vio nacer, reafirmando su compromiso con el juego limpio y distanciándose de cualquier polémica extradeportiva.